Regresar de un largo viaje ¿Y ahora qué?
De todas las aventuras que vivimos viajando, la más difícil es sin dudas la de volver a casa. Es un sinónimo de finalización de una etapa de libertad que nos enfrenta a quien una vez fuimos y nos obliga a reflexionar. Regresar después de un viaje largo puede generar depresión, ansiedad y hasta shock cultural en nuestra propia sociedad. Nos preguntamos ¿Y ahora qué?
Parece sencillo pensar en esto; todos acordaríamos en que siempre se vuelve feliz de un viaje, y en parte es cierto, porque todo viaje implica nuevas experiencias y desafíos. Todo es maravilloso mientras viajamos pero existe algo llamado depresión post viaje (a todos nos afecta en cierta medida) y aquí te damos 10 consejos para superarla y obtener de este período un aprendizaje.
Índice
- 1 Regresar a casa después de un largo viaje
- 2 1. Aprovecha a incluir nuevas actividades o costumbres
- 3 2. Afianzar o cerrar vínculos
- 4 3. No volver a la «normalidad»
- 5 4. Reflexionar
- 6 5. Planear el siguiente viaje
- 7 6. Reservarse las memorias
- 8 7. Minimalismo
- 9 8. Disfrutar de estar en casa
- 10 9. Home is where your heart is / Tu hogar es donde esté tu corazón
- 11 Darse tiempo
Regresar a casa después de un largo viaje
Volver al mismo lugar no significa en absoluto volver a donde partimos. Aunque cuando regresamos todo está igual, nosotros ya no somos los mismos. No miramos con los mismos ojos y todo resulta diferente a cuando nos fuimos. Es la sensación de sentirse extraño donde deberíamos estar familiarizados. Todo allí siguió su curso. Es uno el que se fue por un camino alternativo.
Al principio se disfruta de aquellas cosas que extrañábamos, pero en pocos días la emoción se diluye, los amigos ya nos saludaron y lo demás pierde relevancia.
Para nosotros, que viajamos en familia por largos períodos, estos 10 tips para volver a casa después de un viaje largo fueron claves para no caer en la desesperación y sacar de cada experiencia el máximo provecho. Esperamos sean de utilidad para ti y tu familia.
1. Aprovecha a incluir nuevas actividades o costumbres
La rutina es mortal, y recién llegados de un largo viaje, cargados de puro estímulo, es muy difícil de sobrellevarla. Experimentar con nuevas experiencias y explorar diferentes culturas, ya sea viajando o a través de la lectura y la investigación. Incorporar nuevos idiomas, costumbres y comidas puede abrir nuestra mente a nuevas posibilidades y ayudarnos a crecer como personas.
Claramente cada persona es diferente y lo que funciona para una puede no funcionar para otra, pero lo que importa es encontrar aquellas prácticas y hábitos que nos hacen sentir bien y que nos permiten vivir una vida más plena y satisfactoria.
Al final del día, la vida es corta y debemos disfrutarla al máximo. Incorporar nuevas experiencias y hábitos a nuestra rutina diaria puede ser una forma efectiva de hacerlo.
Nosotros por ejemplo incorporamos muchas recetas sanas de todas partes del mundo con especial atención en una nutrición variada y sustentable. Contagiados por la cultura oriental, nos descalzamos para entrar a casa y dejamos de ver la TV porque entendimos que lo que nos muestran es muy diferente a lo que sucede en realidad.
Estos nuevos hábitos incorporados a la rutina diaria nos hacen sentir más conectados con el mundo y más conscientes de nuestras acciones.
2. Afianzar o cerrar vínculos
Una de las cosas más difíciles para nosotros fue tratar de encajar en nuestro círculo tal como lo hacíamos antes. Amistades de toda la vida con las que ahora nos cuesta sentirnos cómodos.
La diferencia de intereses, la visión de la vida, los objetivos personales y hasta nuestra personalidad cambiada hacen difícil encajar en el rompecabezas que dejamos cuando partimos.
Buscamos nuevos círculos con personas afines, viajeros, inmigrantes, extranjeros con quienes nos sentimos más afín y más motivados.
Cerrar vínculos no significa perder amigos sino seguir por un nuevo camino agradeciendo el recorrido compartido.
3. No volver a la «normalidad»
Aunque hoy poco se conoce sobre la nueva normalidad debido a la pandemia del COVID-19 que vivimos recientemente, volver a lo de antes no es una alternativa. Cuándo regresamos de un viaje largo es difícil ir a una oficina de 9 a 18hs, trabajar para otro y adaptarse a un sistema tan rígido y rutinario.
Es la oportunidad de emprender, de cambiar y crecer. Nuestra mejor opción fue convertirnos en Nómades digitales, camino que de a poco vamos conociendo y aprendemos al andar.
4. Reflexionar
Conectarse con lo que el viaje nos dejó. Rememorar personas, momentos, anécdotas que nos ayuden a ver la rutina con ojos de viajero. Esto no significa aferrarse al pasado sino convertir lo aprendido en parte de nuestro presente.
5. Planear el siguiente viaje
Sin dejar de apreciar y valorar el reciente viaje, empezar a pensar el próximo hará que todo valga la pena. No tomar el regreso como definitivo, sino más bien como una escala.
Si os interesa experimentar un viaje diferente, en Autocaravana, furgoneta o van, como lo hacemos nosotros, te invitamos a conocer Rodantero, tu hogar en el camino. Un sitio con información, asesoría y consejos para iniciarse en este estilo de viajes. Es llevado a cabo por Franco, el papá de esta familia de viajeros.
6. Reservarse las memorias
Contar las anécdotas no tiene nada que ver con vivirlas, incluso muchas veces preferimos guardarlas para nosotros mismos porque resulta inútil que entiendan nuestros sentimientos.
Generalmente no contamos a menos que nos pregunten. Te darás cuenta que pocos realmente están interesados y prefieren seguir hablando de lo cotidiano de sus vidas.
Probablemente te presten sus oídos un rato sin mucha atención y te interrumpan para preguntarte cuándo pensás volver a la realidad y que vas a hacer ahora.
Es inútil tratar de explicarles que su estilo de vida no es el único posible. No trates de convencerlos. Lo mejor es conservar esos momentos memorables en familia y recordarlos en imágenes y anécdotas entre tu y tus hijos.
7. Minimalismo
Un viaje largo es una excelente oportunidad para aprovechar a vivir con lo justo y necesario. Aunque lo material suele hacer más simple la vida, las posesiones nos atan y enraízan.
No se trata de no poseer cosas sino que las cosas no te posean. Simpleza, Minimalismo y viajes es una estilo de vida que adoptamos después de muchas experiencias viajeras.
Yo me quejaba de que no tenía zapatos hasta que me encontré con alguien que no tenía pies.
Una persona común…
La vida nos enseñó en reiteradas oportunidades, que no hacen falta tanto para ser feliz. y nos pasa hoy, viajando en una van autocaravana de 3x6mts en donde teniendo la familia dentro lo tenemos todo.
8. Disfrutar de estar en casa
Disfrutar de estar en casa puede ser una forma de encontrar paz y tranquilidad en medio de un mundo agitado y estresante. Hay muchas maneras de hacer que nuestro hogar sea un lugar acogedor y agradable para estar cuando no vivimos en la aventura constante.
Aprovechemos este tiempo en casa para crear un espacio que nos haga sentir cómodos y felices. Decóralo con recuerdos de tus viajes, imanes, postales, flores secas. etc. Si quieres explorar un poco más sobre esto puedes leer «Colección de recuerdos viajeros» en donde te proponemos como actividad, coleccionar elementos pequeños, gratuitos o económicos que serán un recordatorio tangible de las experiencias y emociones vividas.
Tanto nosotros como nuestros hijo de 2 y 5 años nos focalizamos en lo positivo de estar de regreso. En los viajes largos en Autocaravana que solemos hacer desde hace varios años. al regresar nuestros hijos están felices también. Se divierten con la variedad de juguetes disponibles. También, aunque disfrutaba de su cama convertible en la casa rodante, ama tener su habitación propia en su casa fija. Sacamos provecho a la conectividad wi-fi disponible siempre, la variedad de comercios de la ciudad y ver familia y amigos con quienes compartir momentos.
9. Home is where your heart is / Tu hogar es donde esté tu corazón
Creemos que el hogar está donde está nuestro corazón, y para encontrarlo hay que viajar (hacia adentro y hacia afuera. En ambas direcciones).
Si viajamos sólo afuera nunca sabremos quiénes somos, si viajamos sólo adentro lo sabremos mal.
En el camino encontraremos nuestro hogar, nuestro corazón y a nosotros mismos. No importa que tan lejos viajemos, porque al final de la vida no nos preguntaremos cuántos kilómetros hemos hecho ni a qué velocidad, sino si hemos llegado, realmente, a donde queríamos llegar, a la auténtica meta de nuestro camino.
El hogar no tiene que ver con un código postal, el hogar es una cuestión de corazón, quien es capaz de abrazar y transportar lo más importante para nosotros, lo que nos completa y nos hace ser nosotros mismos y ser felices. Este hogar no conoce geografía, tiempo, materialismo o distancias.
Cuando escuchamos nuestro corazón y seguimos nuestras pasiones, encontramos siempre felicidad y satisfacción. Ese es nuestro hogar, el objetivo final.
Darse tiempo
Al regresar de un viaje largo queremos visitar a todos, empezar nuevamente un proyecto, estar acomodados y que esté todo resuelto. Pero necesitamos tiempo. Las cosas se irán acomodando.
Al regresar de un viaje largo ya no vemos el mundo de la misma manera y ya no sentimos la obligación de cumplir el rol social que se nos fue asignado. Entendemos que hay mucho mas allí afuera y que la libertad es en realidad el tesoro más valioso que alguien puede tener.
Viajar nos obliga a conocer nuestro verdadero ser…Sin compromisos, rutinas ni posesiones que dan sentido a nuestra vida cotidiana, no vemos forzados a encontrarnos dentro nuestro. Nos deja libre para ser quien realmente somos y reencontrarnos. Nos aleja de la rutina y nos conecta con el presente. Somos libre de improvisación, para ser nuestro YO crudo, nuestro YO puro. Nos ayuda a ver costumbres obsoletas y replantear nuestra forma de vida.
Finalmente, les compartimos algunos links que nos gustan mucho y hablan de este tema:
De nuestros Viajeros y escritores favoritos les compartimos esta nota de Dani y Jota de Marcando el polo con su experiencia de regreso a Argentina después de 7 años.
Para quienes saben inglés, les dejamos este post de Nomadic Matt, el viajero estadounidense por excelencia con su experiencia de regreso y depresión post viaje.
Si les gustan los podcast como a nosotros, les recomendamos este de ALTO VIAJE en donde descontracturadamente charlan sobre volver a casa.
Cómo fueron tus experiencias al volver de un viaje largo? cómo lo sovrellevaste? podes dejarnos tu comentario aquí abajo o escribirnos en nuestras redes sociales
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